La gran mayoría de empresarios se preguntan si los sitios web aún son importantes en cuanto a marketing, promoción y ventas.

La respuesta a esta pregunta es un sí rotundo. Un sitio web es una pieza urgente de la metodología empresarial. El negocio en el que se encuentra y el tamaño de su negocio no hacen ninguna diferencia. 

La clave es garantizar que tanto su sitio web como su presencia en las redes sociales se retroalimentan de manera constante.

¿Por qué necesitas un sitio web? 

La ventaja de un sitio web frente a una cuenta en redes sociales, es que en el primero eres el propietario. Al desarrollar aplicaciones web, tienes el control total y la propiedad total sobre el aspecto y las funcionalidades. 

Con un sitio web, mantendrás la presencia digital de tu marca. No solo te hace parecer más profesional, sino que además te permite crear contenido relevante. Esto puede ayudar a respaldar tu clasificación en los motores de búsqueda, al igual que aumentar el potencial de ofertas.

¿Y las redes sociales? 

Pues, millones de consumidores están presentes en las redes sociales. Esto implica que a partir de ahora tienes una multitud de personas sentadas a tu lado; todo lo que necesita es crear contenido y apuntar adecuadamente para garantizar que llegue a tu mercado objetivo y desde aquí, redirigirlos a tu web.

Con el tipo correcto de publicaciones y la información relevante, puedes extender tu mercado a través de las redes sociales.

¿Cómo podrían trabajar juntos? 

Si echas un vistazo de manera superficial, tu web y redes sociales se pueden utilizar de manera comparable. Por ejemplo, puedes vender artículos a través de tu sitio web o comercio electrónico al igual que tu página de Facebook. 

Además, aunque probablemente mejorarás los resultados de las ofertas a través de tu web, las redes sociales tienen diferentes herramientas con las cuales por medio de la creatividad puedes destacarte de tus competidores.

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Las redes sociales son ideales para atraer a tu público objetivo, construir una marca o personalidad en línea y compartir contenido nuevo. Conéctate con tus clientes entablando conversaciones significativas. 

En ese punto, una vez que hayas establecido esa relación, sin duda puedes dirigir el tráfico hacia tu web. Una vez que las personas lleguen a tu terreno digital, mantenlas allí con contenido de valor. Estos pueden orientar a tus consumidores y facilitar la venta de tus productos y servicios.

Conclusión 

En el momento en que unes adecuadamente tu web y tus redes sociales, puedes optimizar tu presencia digital y mejorar los resultados de tus objetivos comerciales.